Retrorace, blog miembro de FOwwwA (Formula One world wide web Association)

jueves, 5 de noviembre de 2009

Mario y el coche-ala


Revivimos el campeonato 1978, que consagraria a Mario Andretti con un revolucionario Lotus 79.
Si el Lotus 78 de la temporada anterior había creado escuela, el modelo sucesor, el Lotus 79 iba a acabar de relanzar al equipo de Colin Chapman a lo mas alto. La idea precedente de crear un vacio bajo los pontones de la carrocería fue potenciada con la instalación de unas faldillas laterales cada vez mas cercanas al asfalto que cerraban toda posible salida de aire que no fuera trasera.
Para pilotar esta máquina que prometía ser imbatible continuaban en el equipo Mario Andretti y Ronnie Peterson, que verían en los Ferrari 312T3 de Reutemann y Villeneuve, ahora calzados por Michelin, como sus mas serios rivales. El campeón del mundo, Niké Lauda, tras su tormentosa marcha de Ferrari encontraba refugio en Brabham, formación dirigida por el cada vez mas influyente Bernie Ecclestone, contando con los motores Alfa-Romeo y Jonh Watson como compañero.
Mario Andretti empezó a cimentar su mundial con una victoria en Argentina aún con el modelo del año pasado mientras que Reutemann respondía en Brasil de la misma forma. Peterson se apuntaba el triunfo en Suráfrica para seguir con una nueva victoria de Reutemann en Long Beach.
El mundial llegaba a Europa donde Depailler obtenía una victoria sorpresa en Mónaco con su Tyrrell por delante de Lauda, que había comenzado su defensa del título manteniendo su habitual regularidad en los puntos. Lotus hizo debutar el nuevo modelo y los resltados no se hicieron esperar: Dos dobletes consecutivos de Andretti y Peterson en Bélgica y España mientras que los Ferrari entraban en un estancamiento que a Reutemann la costaría sus opciones en el mundial.
Lauda conseguiría en Suecia una victoria sonada con un nuevo modelo que Brabham presentó en la carrera. Se trataba del modelo BT46B con un aspirador que succionaba el aire de debajo de la carrocería del monoplaza para enviarlo luego por la parte trasera, aumentando al igual que los Lotus la adherencia en las curvas. Lo divertido estaba al pasar por las zonas laterales del circuito, ya que se levantaba la polvareda del siglo. Niki ganó por mas de medio minuto al Arrows de Ricardo Patrese y al Lotus de Peterson pero las autoridades deportivas tomaron cartas en el asunto prohibiendo para las siguientes carreras este tipo de inventos.
Andretti y Peterson se llevaron cuatro de las siguientes cinco carreras, con un dominio abrumador que comenzaba generalmente en cada tanda de entrenos. En Septiembre el mundial llegaba como era tradicional a Italia donde eran ya solo Andretti y Peterson en su mismo equipo los que se jugaban el mundial. Peterson había aceptado en principio ceder el paso a Andretti que encabezaba la clasificación del campeonato para evitar una lucha absurda pero un extraño accidente múltiple, provocado involuntariamente por Patrese en la salida, marcaría la prueba de Monza. Peterson y otros pilotos se vieron envueltos en él resultando herido con gravedad en una de sus piernas.
La salida se repitió de nuevo y aunque Andretti y Villeneuve cruzaron primero la línea de meta, fueron penalizados con un minuto por arrancar antes de tiempo, resultando ganador Niki Lauda con su Brabham. Lo peor estaba por venir. No mucho después, en el hospital y tras unas complicaciones, Ronnie entró trágicamente en coma, dejando este mundo en cuestión de horas. Se había marchado para siempre una persona maravillosa y un piloto rapidísimo que pese a no ser nunca campeón del mundo, pasó a la historia por ser uno de los grandes de la década y de la F-1 en general.
En Lotus de nuevo, no podían celebrar con demasiada alegría el doble título mundial de pilotos y constructores. No sabían que este iba a ser el último de la marca. La siguientes pruebas se disputaron en Estados Unidos bajo el triste boicot a Patrese por parte de los pilotos (donde venció Reutemann seguido de Jones, que marcó el primer podium para el equipo Williams) y en Canadá, consiguiendo Villeneuve ante su público la primera victoria de su carrera por delante del que iba a ser su nuevo compañero en Ferrari para 1979, Jody Scheckter.
MUNDIAL DE 1978
1º M.ANDRETTI (USA/LOTUS-FORD) 64 Ptos.
2º R.PETERSON (SWE/LOTUS-FORD) 51 Ptos.
3º C.REUTEMANN (ARG/FERRARI) 48 Ptos.
4º N.LAUDA (AUT/BRABHAM-ALFA ROMEO) 44 Ptos.
5º P DEPAILLER (FRA/TYRRELL-FORD) 34 Ptos.
MARCAS
1º LOTUS-FORD 86 Ptos.
2º FERRARI 58 Ptos.
3º BRABHAM-ALFA ROMEO 53 Ptos.

0 comentarios:

Publicar un comentario