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lunes, 19 de octubre de 2009

El Rey de Mónaco




Afeitando las curvas al milímetro cada vuelta por todas partes. Fue una de las mejores exhibiciones de la historia, hasta que cometió un error extremadamente costoso.





De vez en cuando hay un fin de semana como este en la F1, cuando un piloto no es meramente superior al resto, sino en otro nivel distinto, un plano más allá del alcance de sus colegas.


En el pasado, en Monte Carlo, Alain Prost había alcanzado ese plano. Él decía que su vuelta de pole position de 1986 fue la más grande de su vida. Pero mientras en Mónaco 88 Senna estaba saliendo de nuevo en los últimos minutos, Prost (en un coche idéntico) estaba dando vueltas, intentando ponerse a menos de 2 segundos de él.

Por alguna razón Ayrton era el único en Monte Carlo que parecía no tener problemas en encontrar una vuelta limpia. Si no había una aparente, él simplemente hacía una, y luego otra. Era como la apertura del Mar Rojo.

Las clasificatorias de Monte Carlo fueron todas Senna. Gerhard Berger fue el más rápido en la lluvia el jueves por la mañana, pero a partir de ahí Ayrton encabezó cada sesión. Por la tarde una trazada seca emergió durante los últimos 20 minutos y el McLaren Nº 12 rodaba en 1:26.4s, con Prost después en 1:28.3s. Dos segundos, tómalo o déjalo.

Pero fue el sábado por la tarde cuando el brasileño se desmelenó. Después de 25 minutos había bajado a 1:25.6s y 3 minutos después el marcador señalaba un 1:24.4s para él. En los boxes había problemas para aceptar este margen de superioridad. La realidad se suspendió con su siguiente vuelta: ¡ 1:23.998s !

En ese momento los demás estaban buscando bajar de 1:28 desesperadamente. Cuando el tiempo final de Ayrton apareció en los monitores de TV en los boxes, la mandíbula del diseñador de Williams, Patrick Head, se cayó momentáneamente y no fue el único. ¿Cómo era posible? El de Senna era apenas uno más entre los 26 coches acelerando a través del área de salida/meta, rojo y blanco en medio de la "serpiente" multicolor. ¿Dónde podía ganar hasta 2 o 3 segundo cada par de millas?

Si mirabas hacia la piscina, te dabas cuenta. A través de esa serie de terroríficas eses, Ayrton estaba simplemente en otro plano distinto de todo el mundo, y si él estaba poniendo ese grado de dedicación y habilidad en Casino y Tabac y en todos los demás lados, sus tiempos no estaban tan lejos de la razón. Es más, daba la impresión de que cada vuelta sucesiva era un segundo más rápida que la anterior.

Quizás la primera curva a izquierdas alrededor de la piscina es más desafiante para un piloto que cualquier otra en la F1: es rápida, es ciega, y no perdona absolutamente nada. No hay escapatoria, no puedes escapar si haces un error. Aquí puedes ver que coches funcionan bien; más que eso, puedes sentir por su dedicación la fe de un piloto en sí mismo. Senna no sólo era visiblemente más rápido que todos, también consistemente más cercano al muro. Asombroso, de hecho. Era uno de esos días especiales que veías auténtica grandeza. Pero la grandeza de Mónaco no es nada sin el tráfico en el camino.

Más tarde, Ayrton no tendría un claro recuerdo del tráfico en la sesión final: "Para ser honesto, no te puedo decir si conseguí una vuelta absolutamente limpia o no. Todo es tan alocado aquí, que no puedes separar vueltas individuales en tu mente. Pero para ser realmente rápido tienes que usar toda la pista. Y tienes que tomar grandes riesgos, sí".

Otros hicieron eso, si bien quizás no hasta el mismo extremo. Otros tenían un montón de potencia, un buen chasis. Pero sólo Senna lo tenía todo.

"Fantástico", dijo Prost sobre el rendimiento de su compañero de equipo, "no hay otra palabra ¿no? Creo que siente lo mismo que sentía yo hace 4 años con Niki. Yo había ganado algunas carreras, sí, pero no el campeonato. Y realmente tenía que batir al tipo establecido en el equipo. En esas circunstancias, quizás tomas riesgos como nunca harás de nuevo. En el 84 no tenía absolutamente nada que perder y es lo mismo para Ayrton ahora".

En el paddock la gente decía "El Rey ha muerto, viva el Rey" y ese tipo de cosas, pero parecía un poco prematuro con sólo 3 carreras. Pero, lo admitamos o no, parecía que un nuevo orden empezaba a tomar orden en McLaren.
No es que hubiera algo mal con Prost. Después de la última sesión admitió que nunca había encontrado el ritmo en Monte Carlo, pero el coche iba bien y no tenía quejas. Y con todo eso dicho, le sacaba más de 1 segundo al tercer puesto del Ferrari de Berger. Sin Senna, eso hubiera parecido bastante impresionante...

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